Desde Bodegas y
Viñedos Labastida en colaboración con
Neiker Tecnalia hemos desarrollado un proyecto de investigación para identificar las áreas del viñedo que
requieren un manejo similar según las características del tipo de suelo, el
microclima y las cepas. Estas zonificaciones nos permiten identificar
diferentes partidas de entrada de uva por sus calidades desde el campo,
clasificando la materia prima antes de su entrada en bodega y mejorando desde el inicio del proceso productivo la calidad de nuestros productos.
Éste trabajo está enmarcado dentro del proyecto CENIT-DEMETER, subvencionado por CDTI, donde un consorcio de 26 empresas junto a 31 grupos de investigación españoles hemos diseñado una serie de proyectos encaminados a conseguir conocimientos científicos y tecnológicos para tomar medidas de adaptación a las nuevas condiciones producidas por el calentamiento global.
Éste nuevo
sistema de trabajo permite a nuestros viticultores conocer las prácticas de
manejo que requiere cada subzona dentro de una parcela, dando un paso de gigante en
el conocimiento del potencial productivo y de calidad de cada viñedo,
facilitando además, herramientas al agricultor para racionalizar el uso de
fitosanitarios en el campo.
Por otra parte, el manejo de esta información permite determinar desde el origen
las calidades de la uva,al igual que nos permite definir con antelación el momento óptimo de recolección y
elaboración según sus calidades y las características diferenciales de los vinos que
queremos elaborar.
Durante 4
años nuestros técnicos de la mano de los técnicos de Neiker han investigado las distintas
características del suelo de todos los viñedos, el vigor
individualizado de las vides mediante teledetección por satélite, vuelo y
sensor terrestre y han superpuesto todos estos datos con las variables
climáticas y de predicción de enfermedades para geolocalizar áreas de cuatro tipologías
de uva finales. Los resultados en vino son tremendamente coincidentes con las
áreas delimitadas.